El hallazgo del día ha sido toparme en mi caminata matutina habitual, con lo que, en un principio, pensé: ¡Guau decenas de pececitos muertos!... para, después de algunos pasos más, exclamar para mis adentros. ¡Jo, cientos...!! modificando mi pensamiento a cada paso. ¡¡¡Miles...!!!. A lo largo de toda la orilla, incluso superando el río Jara, se encontraban pezqueñines muertos, tanto en el agua como en la arena, como en las propias marismas, en aglomeraciones o esparcidos. Nunca he visto cosa semejante. Y aunque ahora hablar de millones sea algo habitual y en apariencia cifra cotidiana, me cuesta admitir que pudieran haber millones de pececitos muertos acompañándome en mi recorrido playero, pues contaba con nuestro amigo Levante, pero no imaginé que se uniera a la cita esta estampa.
NUESTROS PEQUEÑOS REPORTEROS
Hace 4 años
2 comentarios:
Joder que pasada, yo voy a diario y no los vi, no te los comerias tu todos.
Pues ya es raro que no los vieras porque incluso al día siguiente había restos pasado el Río Jara.
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