Con la intención de implicar lúdicamente a los gaditanos en la celebración del bicentenario de la Constitución de 1812, arrancó esta fiesta en el recinto del Puerto Pesquero, que de esta forma se abría al público.
Numerosas pequeñas carpas con venta de artesanía, náutica, gastronomía, bares, burguer... se repartían por el recinto, atracciones para los más pequeños, áreas deportivas para baloncesto , skate y voley.
Aunque lo que mayor espectación causó fue la visita a los dos galeones expuestos, a tenor de las grandes colas que durante todo el día se produjeron para las visitas. Así el Galeón la Pepa y la Nao Victoria fueron visitados por numeroso público; grandes y pequeños no querían perderse la ocasión de poder caminar por el interior de las embarcaciones, réplicas de las originales que fueron vehículos para el Nuevo Mundo.
También podía visitarse la embarcación de la Guardia Civil. Otro espectáculo seguido con interés fueron las exhibiciones de adiestramiento de perros del Cuerpo.
Los conciertos se sucedieron durante la semana: Merche, Andy y Lucas, Delinqüentes, Tomasito. Música Iberoamericana, percusión en vivo, saxofonista... completaron la oferta musical.
La exposición de maquetas de barcos y fotografías de la tradición de construcción de barcos con un vídeo sobre la historia de los astilleros de Matagorda formaban también parte del evento.
Concentraciones de motos Harley Davinson y coches de épocas se reservaban para el fin de semana, que tras circular por la ciudad quedaban expuestos junto al escenario.
La fería se cerró con castillos de fuegos artificiales, al igual que su inauguración.
Y aunque la ciudad vivía paralelamente la festividad del Corpus Christi, numeroso público se pudo ver durante todo el fin de semana.
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